Este pequeño robot blando que puede rastrear a través de huecos y que además no puedes matar, ahora ni siquiera podrás verlo, ya que ha aprendido a camuflarse, incluso en el infrarrojo o todo lo contrario y brillar en la oscuridad.

El laboratorio George Whitesides de Harvard han cogido el robot neumático blando y le han añadido una capa de «piel» que contiene canales de microfluidos. Al bombear líquidos de colores a través de estos canales, el robot cambia completamente de color en 30s. También se le puede añadir tintes fluorescentes para verlo en la oscuridad o líquido a temperatura ambiente para que el robot sea invisible a los detectores de infrarrojos.

Vía / Discovermagazine

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